jueves, 21 de enero de 2016

El tiempo con las amigas es bueno para la salud


Los beneficios para la salud que el tiempo en amigas ofrece, no aplica de igual forma para los hombres. Esto se debe a que existe una gran diferencia entre la forma en la que un hombre se relaciona con sus amistades masculinas que la forma en la que una mujer se relaciona con sus amistades femeninas. Los hombres suelen formar sus amistades alrededor de actividades como deportes y pasatiempos. Es rarísimo ver que un hombre se junte a tomar un café con un amigo tan sólo para platicar de sus sentimientos y de su vida personal, mientras que esto es algo que las mujeres hacemos con mucha facilidad.
Para la mujer, compartir sus emociones y sentimientos con sus amigas resulta ser como una válvula de escape, una forma de desahogarse de sus problemas. Ya todas sabemos lo bien que esto se siente, pero lo mejor de todo es que según la evidencia, esto nos brinda grandes beneficios a nuestra salud, a tal grado que el profesor de Stanford los comparó con los beneficios que brinda el ejercicio. Desde luego que esto no ocurre tras comentar el chisme más reciente de la compañera de trabajo o con criticar a la nueva novia del ex esposo. Es a través de la “verbalización” de todas esas emociones y el sentirse escuchada y entendida por sus [buenas] amigas, quienes a su vez le brindarán los mejores consejos posibles, que las mujeres se benefician de pasar tiempo juntas. Procure entonces juntarse con sus amigas al menos una vez por semana y brinden por el bienestar de todas. ¡Salud!


Luego del parto, ¡ejercicios post-natales!


Después del nacimiento del bebé, el reposo y los ejercicios adecuados durante las semanas siguientes son de fundamental importancia para la madre. Es un período en el que su cuerpo se recupera y se ajusta para una nueva forma de vida. Los ejercicios post-natales promueven que el cuerpo regrese más rápido a su estado normal. Desde las primeras horas después del parto se producen cambios importantes, entre ellos las contracciones de involución, que reducen el tamaño del útero, y la pérdida de líquidos.

Los cuidados post-natales deben iniciarse a las pocas horas del nacimiento. El primer ejercicio será el de comprobar la tonicidad del piso pélvico cortando el flujo de orina, conocido como ejercicio de Kegell. Éste ejercicio debe empezarse gradualmente hasta llegar a completar 25 contracciones durante 3 veces al día. Debido a que la prioridad es el recién nacido, basta con pequeñas sesiones de ejercicios específicos durante pocos minutos al día para alcanzar los resultados deseados. Si se combinan con métodos de relajación y descanso los resultados son aún mejores, ya que mejoran el ánimo y el estado de energía. A los 40 días, prácticamente desaparecen todas las molestias post-parto.